Somos Amigos de la Tierra - NOTICIAS

6 de octubre de 2006

México: Repunta la pobreza

Uno de los logros más notables y publicitados del sexenio de Vicente Fox Quesada, el combate a la pobreza extrema, es sometido a severo cuestionamiento por organismos nacionales e internacionales que investigan y trabajan sobre la materia.

Cuando sólo le restan 56 días a la autodenominada pareja presidencial y sus familiares para disfrutar ilimitadamente, como lo han hecho, las mieles del poder, brotan por todos lados balances, cifras y denuncias periodísticas que convierten en ilusiones los que se consideraban actos y obras de gobierno que habían merecido reconocimientos hasta de la ONU, por ejemplo en el abatimiento de la pobreza.

Ciertamente -como sin ton ni son dice Fox-, es de sabios cambiar de opinión. Ahora lo hace el Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos, al criticar al gobierno mexicano por la ausencia de una política social de combate a la pobreza en áreas urbanas, pese a su advertencia de que a partir de 2007 habrá un “crecimiento desordenado en esas zonas” a escala mundial.

El diagnóstico de Erick Vittrup Christensen, oficial principal del programa, consiste en que la situación es “preocupante porque vemos ciudades como Río de Janeiro, Bogotá o México, donde los males de la pobreza urbana comienzan a crear una nueva cultura de violencia de una dimensión que no se puede combatir con los mecanismos tradicionales”. El informe revela que el Distrito Federal y Sao Paulo, Brasil, son las grandes ciudades que albergan el mayor número de pobres urbanos en América Latina.

Mas el panorama del agro mexicano no resulta alentador. Para el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social el número de pobres en situación extrema se incrementó en el penúltimo año de gobierno de Fox Quesada.

Los datos fueron bien guardados por Los Pinos y finalmente trascendieron:

En pobreza alimentaria, los que no tienen ni para comer aumentaron en 2005 en el campo, en un millón 631 mil 375.

Los que padecen pobreza de capacidades se incrementaron en el agro, durante el mismo año, en un millón 382 mil 613. Y en pobreza de patrimonio recayeron un millón 688 mil 671 habitantes del campo.

Con las denominaciones tecnocráticas que se escojan, la pobreza extrema se incrementó en el agro y retrocedió ligeramente en las ciudades, de acuerdo al órgano mexicano. El número de personas a escala de indigencia creció en más de un millón.

Los datos duros del Coneval exhiben en toda su dimensión al mundo de Foxilandia en el que vive el grupo gobernante y que dentro de dos meses no podrá sostener ni con la magia de la pantalla chica del duopolio televisivo, ni toda la mediocracia al servicio del oficialismo que retribuye muy bien los servicios prestados. Ellos serán los primeros en descubrir, como ya les sucedió al concluir el gobierno del estigmatizado como usurpador y genocida Carlos Salinas de Gortari, la recurrente y agobiante realidad.

Lo entiende mucho mejor Carlos Slim Helú, el tercer hombre más rico del mundo: “No avanzamos” con el actual modelo económico, impuesto desde 1982. ”Estamos creciendo alrededor de 0.2 por ciento per cápita, casi cero. Y estamos expulsando casi 400 mil personas que no encuentran oportunidad de empleo”. Mientras que durante medio siglo, dice, la economía mexicana creció a un ritmo de 6.2 por ciento anual.

El irracional modelo de capitalismo salvaje, esa eficiente fábrica de hacer pobres, se dispone a reproducirlo puntualmente Felipe del Sagrado Corazón de Jesús Calderón Hinojosa.

Fuente: Opinión- Eduardo Ibarra